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¿Cuál será el nuevo compromiso social del siglo XXI?

La volatilidad actual en el empleo tecnológico presagia un cambio de las visiones anteriores del sector centradas en las personas, y eso es preocupante.

A medida que el sector de la tecnología lucha y la respuesta a la que acudir parece ser los despidos masivos, a menudo se habla de "lean" como el método de reducción de costes a corto plazo y alta eficiencia. Como suele ser el caso, Elon Musk abrió el camino al comprar Twitter y luego despidió rápidamente a la mitad de su plantilla. Aunque los usuarios de Twitter han tenido algunas molestias menores, el servicio parece funcionar como antes de los despidos. Luego, Mark Zuckerberg, aparentemente un rápido seguidor de Musk, despidió a 11.000 personas de Meta Platforms Inc. en el otoño de 2022 y este marzo anunció otro despido de 10.000 más.

Parece que el contagio se está extendiendo a las empresas automotrices a medida que intentan deshacerse de su imagen como fabricantes de grandes consumidores de gasolina y convertirse en empresas de tecnología ecológica que venden coches autónomos con batería eléctrica. Algunos informes estiman[1] que Ford despedirá al 12% (24.000) de su plantilla, y General Motors anunció la concesión de jubilación anticipada para “la mayoría de” sus trabajadores asalariados de EE.UU., lo que se traduce en el 100% de sus trabajadores con al menos cinco años en la empresa. Si bien hubo un momento en que estos despidos se centraron principalmente en los trabajadores de las fábricas, ahora están afectando a los profesionales técnicos.[2]

Un artículo del Wall Street Journal informó sobre la visión de Zuckerberg de "Cómo dirigir una empresa" en 2023. El informe señalaba que cuando cambió la financiación de Meta de Facebook a grandes inversiones a largo plazo en el metaverso, la empresa pareció desmoronarse. Por lo tanto, pasó de lo que podría haber sido un gasto excesivo en I+D a largo plazo al “año de la eficiencia” y declaraba que cuanto más plano, mejor. Se le cita diciendo que eliminaría el desperdicio eliminando a los mandos intermedios y cancelando proyectos innecesarios, lo que indica que había aprendido que "más Lean es mejor".[3]

En el mundo de las nuevas tecnologías, que giran principalmente en torno a productos y servicios digitales, parece haber una opinión de que incluso los tecnólogos altamente calificados son piezas reemplazables. Son casi como contratistas que vienen autónomos, responsables de su capacitación y desarrollo, enchufando sus ordenadores y dejándolas funcionar. Como vagabundos, van donde está el trabajo.

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